Los riesgos de no tener digitalizado tu negocio de automoción que invitan a reflexionar

Según el último Informe de la Sociedad Digital en España, las empresas cuentan con “bajo nivel de digitalización”. De hecho, “poco más de un tercio de todos los negocios comparte información por medios electrónicos y solamente una cuarta parte hace uso de los medios sociales, como canal de comunicación con los clientes y como una plataforma para posicionar la marca”.

Estos datos, extrapolables también al sector de la automoción, invitan a una profunda reflexión sobre todo en un momento en el que el usuario ha cambiado drásticamente sus hábitos de consumo: se comunica a través del móvil, comparte información de manera constante y compra cada vez con más frecuencia de manera digital.

Entonces, ¿cuáles son los motivos que llevan a este bajo índice de digitalización?

Estos cambios de consumo particular no se ven reflejados en cómo las compañías se gestionan de manera interna.

Analizamos los riesgos que asumimos al respecto y cómo la tecnología nos ayuda a ser más eficientes.

Motivos por los que digitalizar la gestión de un taller o concesionario ya no es una opción

En un entorno cada vez más competitivo, la automatización ayuda a ser ágiles y eficientes. Seguir anclados en tareas manuales, además de no permitirnos escalar a nivel de negocio, dificulta un buen seguimiento de tareas.

Todo ello se traduce en protocolos de atención al cliente deficientes y antiguos.

La digitalización del taller con la ayuda de un software en la nube como el de CAR proyecta, además de eficiencia, una imagen de modernidad y sofisticación que también reclama el cliente de hoy en día.

La transformación digital es un proceso profundo pero necesario. No se trata de un cambio en un programa en un ordenador, sino de una forma de entender que el consumidor actual no tiene nada que ver con el de hace dos décadas. Algo que se ha visto acelerado, por otra parte, con la pandemia.

Esa transformación digital implica formar al equipo -también a los directivos y gerentes- en lo que va a suponer el cambio en el taller y en el concesionario para tener la oportunidad de posicionarlo como un referente y convertirnos en el mejor prestador del servicio para el cliente.

Más allá de ello, el tener datos en tiempo real y la oportunidad de saber qué ocurre en nuestra empresa en todo  momento, nos ayudará a tomar decisiones más rápidas y acertadas.

Invertir en un plan estratégico de digitalización evitará que:

• Nos quedemos fuera del mercado.
• Perdamos eficacia.
• Malgastemos los recursos económicos y humanos con los que contamos.

Por otra parte, contar con un CRM ayuda a:

• Tener toda la información del negocio en un mismo programa.
• Acceder a los datos siempre que se necesite, aunque no estemos en nuestro puesto de trabajo.
• Automatizar tareas.
• Crear recordatorios y alarmas, huyendo de las notas desordenadas y las agendas de papel.
• Tener un control exhaustivo de todos los procesos.

Más allá, el mercado ofrece alternativas que integran toda la gestión del taller o concesionario. En el caso de CAR, a la propia actividad administrativa se une, por ejemplo:

• Agenda digital: preparación de la cita y asignación de actuaciones.
• Recepción activa: diagnóstico detallado del vehículo a través de la App.
• Reparación: registro y seguimiento de actuaciones y notificación de extensiones.
• Control de calidad: configuración de checklists para garantizar el mejor servicio.
• Servicio comercial postventa: gestión de ofertas, seguimiento y marketing postventa.
• Firma digital: validez y fiabilidad desde la propia App. Informe de la recepción en la bandeja de entrada de su cliente.
• Estadísticas: control de stock y gestión de almacén de forma automática. Esto permite la anticipación a la hora de pedir materiales y recambios.
• Esquemas visuales: inspección visual del vehículo con fotos, vídeos y audios.
• Informes
• Encuestas de satisfacción

¿Estás preparado para construir el taller del futuro? Prueba nuestra demo.